Los Voluntarios de la Palabra comienzan a ir a leer a las residencias de mayores

Veinte personas ya se encuentran inscritas como voluntarios de la palabra. Acudirán a residencias de mayores de Ciudad Rodrigo y comarca para leer textos en voz alta, actividad enmarcada en el proyecto “Enclave literaria” de la Fundación Ciudad Rodrigo y AFECIR, subvencionada por el Ministerio de Cultura.

En la tarde de hoy ha tenido lugar la primera de las sesiones de lectura en voz alta. Cuatro voluntarias y la técnico coordinadora del proyecto han estado en la Residencia Obispo Téllez de Ciudad Rodrigo. Nueve residentes han participado en la sesión, donde ha habido una presentación, lectura en voz alta y han finalizado con refranes. Incluso uno de los participantes ha terminado recitando una poesía.  Los voluntarios de la palabra volverán a esta residencia dentro de quince días.

Este miércoles 5 de febrero, será la siguiente sesión, un grupo de voluntarios de la palabra se acercará a leer en voz alta a la Residencia Mixta de la Diputación de Salamanca (10:45-11:45) y el jueves 6 de febrero la sesión será en la residencia de Fuenteguinaldo (17:30-18:30 h.)

Hasta el momento, ya hay residencias de mayores interesadas en llevar a cabo esta actividad en Ciudad Rodrigo, Fuenteguinaldo, Casillas de Flores, El Payo, Peñaparda y El Sahúgo.

El listado tanto de residencias de mayores como de Voluntarios de la Palabra continúa abierto. Aquellas entidades o personas interesadas pueden ponerse en contacto con la Fundación Ciudad Rodrigo a través del teléfono 923 16 97 63 o en la sede de la entidad en la Plaza Herrasti,3 de Ciudad Rodrigo y en el correo patrimoniofundacioncr@gmail.com

La Fundación Ciudad Rodrigo y AFECIR llevarán a cabo el proyecto “Enclave Literaria. Encuentros con las palabras y la literatura en pueblos de la Raya”, subvencionado por el Ministerio de Cultura. El objetivo es la realización de encuentros literarios en localidades de La Raya Salmantina y la ejecución de un programa de actividades paralelas, entre las que se encuentran los Voluntarios de la Palabra, que acuden a leer en voz alta a residencias de mayores.

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